Fumigación
El control de plagas es la acción de mantener las poblaciones de plagas por debajo de los niveles que causan un perjuicio a la salud de los humanos, animales y flora. Este incluye la aplicación de plaguicidas y desinfectantes. Los sitios donde los servicios de control de plagas pueden realizar sus actividades son: casas habitación, centros de salud, guarderías, fábricas, locales comerciales, mercados, oficinas, jardines, calles y otros sitios públicos; y en los que en consecuencia se presentan plagas que afecten la salud pública.
Los lineamientos de las condiciones sanitarias de control de plagas, se pueden consultar en la Norma Oficial Mexicana NOM-256-SSA1-2012, Condiciones sanitarias que deben cumplir los establecimientos y personal dedicados a los servicios urbanos de control de plagas mediante plaguicidas.
Con el objetivo de comprobar que los servicios para sanear, desinfectar y/o sanitizar (excepto fumigación y/o aplicación de plaguicidas), espacios públicos y privados, se realicen de conformidad con las buenas prácticas en el uso de desinfectantes durante la prestación de los servicios que se señalan en la NOM-256-SSA1-2012, estos deberán cumplir con la documentación y requerimientos listados por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) para su cumplimiento así como posteriores visitas de verificación sanitaria.
Los productos químicos pueden causar efectos en todos los sistemas del cuerpo humano, dependiendo de la vía de entrada, si es por vía respiratoria, digestiva o dérmica, del tiempo de exposición a las mismas, del número de exposiciones, del estado físico (sólido, líquido o gaseoso) y de la sensibilidad o susceptibilidad de las personas a esas sustancias.
Algunos de los daños a la salud que se pudieran presentar al no tomar en cuenta las medidas preventivas en el manejo de sustancias químicas son: irritación en piel, ojos y vías respiratorias, cambios en la pigmentación en la piel, daños al hígado y riñones, mutagenicidad, cáncer e incluso hasta la muerte.
Debido a esto es de suma importancia llevar a cabo el manejo adecuado de las sustancias químicas y materiales peligrosos ya que a través de dicha gestión se busca prevenir o mitigar riesgos a la salud y al ambiente, tomando en cuenta que la dispersión de contaminantes químicos no tiene fronteras y sus impactos pueden ser no solo locales sino globales.
Por lo anterior, en la UANL actualmente se está promoviendo en todas las dependencias atender este rubro tomando como base lo establecido en la NOM-018-STPS-2015, ya que diariamente miles de personas (alumnos, profesores y empleados) realizan actividades académicas, de investigación y/o mantenimiento en laboratorios, talleres, imprentas, entre otras, donde se utilizan sustancias químicas, por lo que se están llevando a cabo cursos y conferencias como capacitación y adiestramiento a todo el personal que está involucrado en el manejo de sustancias químicas y materiales peligrosos.
Además, en la página web de la SS se tiene disponible la Guía de Sustentabilidad para Talleres y Laboratorios donde entre otros temas se incluye información del manejo de residuos y sustancias químicas.