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En la gran tarea educativa dirigida a transitar hacia una sociedad sustentable, el tema del consumo responsable tiene una importancia estratégica, ya que existe un amplio consenso sobre el papel que tiene el consumismo como principal fuerza motriz de la economía y la cultura insustentable.

El consumismo ha logrado permear en la mayor parte de las clases sociales, principalmente en los países en desarrollo y altamente desarrollados, debido al crecimiento exponencial que la productividad ha tenido, especialmente durante los últimos setenta años.

En contra parte de esta situación, el consumo responsable se entiende como una actitud consciente de las repercusiones que tienen el consumo personal y colectivo sobre gran parte de los problemas que aquejan al mundo: las crisis ambientales, socio-económicas y culturales.

La responsabilidad en el consumo implica, la conciencia crítica, la valoración ética y el posicionamiento activo a favor de los principios de justicia, solidaridad global y respeto hacia la Naturaleza, y en contra de las empresas con prácticas y productos que subvierten y contravienen estos valores. El comportamiento congruente que surge de estas actitudes lleva a una austeridad voluntaria en cuanto a deseos y caprichos materialistas superfluos, encontrando satisfacción y plenitud en las relaciones sociales, las artes, la naturaleza y la construcción de un universo alejado del utilitarismo.

La promoción del consumo responsable entre los miembros de la comunidad universitaria y su entorno social tiene para la Universidad Autónoma de Nuevo León un doble propósito: promover el compromiso de actuar de una manera ética y responsable, y mostrar a la sociedad que es posible adoptar política de consumo responsable sin atentar contra la calidad de vida y el bienestar de las personas.

El Consumo Responsable es entendido como las acciones orientadas a llevar a cabo la elección de los productos y servicios no solo en base a su calidad y precio, sino también por su impacto ambiental y social, por la conducta y el respeto a los derechos humanos de las empresas que los elaboran. Este concepto se basa en la idea de que consumir no se limita a la satisfacción de una necesidad, sino que implica incidir en los procesos económicos, medioambientales y sociales que posibilitan el bien o producto consumido.

La UANL promueve entre los miembros de la comunidad universitaria actitudes de Consumo Responsable con el fin de convertirse en un referente y modelo de buenas prácticas para la ciudadanía, promoviendo el ejercicio de un consumo comprometido con el Comercio Justo y de productos ecológicos, locales o regionales, lo que está en concordancia con lo establecido con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sustentable, adoptada por la Asamblea General de la ONU el 25 de septiembre de 2015, en su apartado No. 12 que establece el consumo responsable y sustentable.

La principal estrategia establecida por la UANL para promover el Consumo Responsable entre los miembros de la comunidad universitaria, se basa principalmente en la reducción de los desechos que se generan en la realización de las actividades cotidianas.

En este contexto, desde el año de 2015 la UANL impulsó el programa de Bebederos de Agua Potable, el cual contempló la instalación de dos plantas purificadoras de agua ubicadas en Ciudad Universitaria, las cuales abastecen a 30 bebederos ubicados los siguientes sitios:

Durante el 2019, los bebederos expidieron 2,469,293 litros de agua potable, lo que significó que los miembros de la comunidad universitaria dejaran de consumir 4,938,586 botellines de agua potable comerciales en presentación de 500 ml. 

La operación de este proyecto representó grandes beneficios ambientales, al evitar la generación de residuos sólidos (botellas de PET), proteger la salud de los usuarios, además de significar importantes ahorros económicos para los mismos, calculados en un poco más de $ 41,977,981.00 (MXN). 

Dicha operación de los bebederos de agua potable instalados en Ciudad Universitaria ha permitido obtener los siguientes beneficios ambientales, al evitar la generación de residuos sólidos (botellas de PET), proteger la salud de los usuarios, además de significar importantes ahorros económicos para los mismos.

 

Adicionalmente, en la actualidad la UANL promueve distintas acciones para llevar acabo un uso eficiente del papel y plástico, incentivando la disminución del consumo de estos materiales y/o su uso eficiente, lo que ha permitido lograr una importante reducción en la cantidad de residuos generados. Algunos ejemplos de estas acciones son las siguientes:

  1. Aplicar el principio de reutilización de materiales en todos los casos que sea posible (por ejemplo, utilizar el papel por ambas caras) antes de desecharlos.
  2. Utilizar el correo electrónico para el envío de comunicados, memorándums, invitaciones y documentos evitando la impresión y distribución de los mismos.
  3. Emplear pizarrones o tableros para anuncios, eliminando el envío de comunicados en papel.
  4. Imprimir documentos en calidad de borrador, reduciendo el gasto de tinta y promoviendo la reutilización por ambas caras del papel.
  5. Editar o corregir documentos en formato digital y no en papel, ayudando a disminuir su utilización.
  6. Establecer campañas de donación e intercambio de libros y revistas entre dependencias.
  7. Promover el uso de loza en oficinas, reuniones y conferencias, reduciendo a cero el uso de utensilios desechables.
  8. Migrar a un sistema de gestión de documentos electrónicos o utilizar plataformas como el correo electrónico (Outlook) en el cual se pueden agendar juntas, conferencias, eventos de manera formal, mandando recordatorios de la cita o evento a todos los participantes y solicitar confirmación de lectura, evitando la generación de documentos.
  9. Sustituir el consumo de agua embotellada, fomentando el uso de termo o recipiente personal reutilizable, el cual se puede rellenar mediante un sistema dispensador.
  10. En las cafeterías promover la venta de refrescos en botellas de vidrio retornables, así mismo utilizar loza en lugar de platos y vasos desechables.